sábado, 29 de diciembre de 2012

New Year's Resolutions

Hoy la noche está despejada y fría, con una luna llena plena, extraordinaria!

Está acabando el año y una de las sufridas compañeras del curso pasado me ha pedido que le remita de nuevo la dirección del diario para, según ella dice, "volver a leerlo con la objetividad de la distancia". 

Creo que no es una mala idea; la perspectiva. Algo que me ha traído a la memoria unos minutos de radio de hace aproximadamente un mes en los que había una charla con una MEDICO (escribo en mayúscula a sabiendas) que dedicaba parte de su tiempo fuera de consulta en Ciutat Vella -Barcelona- a ayudar a quien no era objeto de ayuda hace bien poco. Había abierto su propio banco de alimentos que lo gestionaban "pacientes" que habían acudido precisamente a buscar esa comida con anterioridad.
Había muchos pormenores de la charla que no recuerdo ni vienen a cuento. Pero sí me pareció interesante la reflexión de uno de los periodistas que, tras hacer el típico balance del por qué hemos llegado a esta situación, se mostraba muy crítico con la sensación de "acostumbrarnos a algo que no debería ser así"; acostumbrarnos a que el día de hoy será seguramente mejor que el de mañana. Suena heavy ¿verdad? Pero me recordó la "perspectiva" que yo trataba de mantener en el centro docente el curso pasado: acostumbrarnos a que las voces de la Jefatura, los gritos de otros, los portazos, el olor a porro, el desafío, la desfachatez, la falta de vergüenza, la risa en la cara, el ¡a mí no me toques!, los empujones... "Cositas" de las que no te habían hablado ni en la facultad ni en el CAP y que dejaban la docencia y la terapia para uno mismo. "Tablas", lo llaman unos; "curtirse" lo llaman otros. Será eso: te curtes con una doble piel y dejas de valorar lo extraordinario como lo que es: algo que no debe ser. Para eso es buena la distancia; la perspectiva.

¿Qué le pido al próximo año?: SALUD
El resto ya vendrá.

Bueno no; salud y espíritu crítico. Para que no nos curtamos ni acostumbremos a esta mierda que los salva-españas consideran "necesaria" para salir... ¿hacia dónde?

lunes, 30 de julio de 2012

Reflexión (Nº IV) de vacación

¿Qué escribir que no esté ya en boca de tod@s?
Hablo de este ahogamiento paulatino, lleno de mentiras o medias verdades con que ahora bombardean nuestros oídos "olimpicos". No desesperemos si no hay muchas medallas; ¡pronto empieza la Liga!

"¿Qué no sabes lo que es el diferencial con el bono alemán? ¡VENGA YA!"
"¿Qué no sabes ya que sobran dos millones de funcionarios? ¿NO ESCUCHAS LAS NOTICIAS??

Como ya comenté en su momento, las autonosuyas están repartiendo el "café para todos" según su discreción: en Andalucía ya habían bajado sueldos y más tarde lo hicieron en Madrid, donde llevan ya varios años sin pagar el verano a los interinos, algo que pronto hará la primera, que también ha dejado las cosas en el aire hasta septiembre.... ¡y qué decir de Valencia!
Parece confirmado que no se pagarán las guardias el próximo curso. Imagino que l@s compañer@s que sufran esas consecuencias en el centro en el que yo he estado se rebelarán, o contratarán a guardias- jurado... ¡o agacharán la testuz y se dejarán picar!

En el balcón de mi casa he colgado una pancarta con dos versos del siempre certero y presente, César Vallejo:

"Más valdría -en verdad
que se lo coman todo y acabemos!"

jueves, 28 de junio de 2012

Epílogo

¡Esto se acaba!
Llega concluir, quizá temporalmente.

Día de REciclado: en dos días hemos llenado dos papeleras, de las grandes. Aunque paradójicamente, hemos producido documentos para llenar otras dos.
Seguimos con la paradoja: curiosamente, los alumnos con todas las asignaturas superadas en esta convocatoria sólo han recibido dos documentos -3ª evaluación y ordinaria- junto a una firma y una enhorabuena. Mientras que el número de papeles, aumentaba progresivamente, en relación a los suspensos. Alumnos con más de diez asignaturas pendientes o absentismo pertinaz se han llevado a la papelera (¡perdón, a casa!) unos tochos de cuarto de kilo de papel. Esto, unido al comentario de un seguidor a la entrada del pasado jueves, no es pedagógico, ni serio, ni educativo; ¡es vergonzante!

Día de REcuento: unos compañeros me han dado el número de partes acumulados y otros, por lógica desgana, me han pedido que los cuente yo:
En el mejor de los primeros hay 70 partes, en otro 141, en otro más 74, en uno de los terceros nos juntamos con 112 y en el curso excelente iba por 160 cuando tocó el timbre. Yo he acumulado 189 y me han faltado otros dos cursos pero creo que es suficiente botón de muestra. Contando que la jefatura de estudios se ha quedado con todos los bloques de partes de cada expulsión, que han sido numerosas, doy por hecho que se supera el millar de partes.
Hace unos días, hablando con otro docente, me comentó que en su centro, en algo más de un trimestre ¡se habían acumulado 1400 partes!. Me cuesta creerlo, pero parece ser que era la única herramienta -ficticia- que tenían los profesores y el asunto provocó un claustro extraordinario porque el adjunto a la jefatura, ya sólo se dedicaba a gestionarlos. Solución: se abrió la veda de los expulsados
Comparaciones, siempre odiosas, si encima se hace con lo peor.

Día de REconocimiento a la labor desempeñada, durante estos burocráticos días, a la Secretaría. Creo, sinceramente, que ha multiplicado su labor, ante la ausencia de aquel/la administrativ@ que se dio de baja en al primer trimestre (¡parece un siglo!). Hay una grapadora con su nombre puesto; quizá lo único que quede de él/ella.

Día de REsentimientos o REncores acumulados..... ¡ninguno en absoluto! A veces me preguntan por el fin de este diario y les doy razones varias, que podrían valer o no. Una de ellas es dar a conocer fuera, lo que acontece en un centro, dentro. Y dentro y fuera me han animado a seguir, con palabras directas del estilo "¡..lo que cuentas es la puta verdad!" o de forma indirecta, con el número de visitas, ya cercanas a dos mil. Me consta, que el equipo directivo ha sumado visitas a esa cifra y como he dicho más arriba no tengo ningún rencor hacia ellos. Como una compañera muy bien definió, es un equipo directivo que "está resabiado" y forma parte de un trípode muy difícil de desestabilizar; las otras dos patas son el centro (su ubicación) y los alumnos.
La dirección, en el claustro de "bienvenida", ya puso la venda antes de la herida, negando su "falta de culpa en que el equipo docente cambie año tras año". No estoy de acuerdo: no ayudan a que se creen programas, con gente joven, dispuesta a romper ese círculo...

¿REpetir? ¡No, gracias!

Se que ha habido, al menos, otro blog de este centro y a lo mejor hay más, en el futuro...
Ese el el problema ahora: el futuro

jueves, 21 de junio de 2012

Jueves, 21 de junio

Días de resumen, de rellenar documentos, de buscar papeles o escritos que tengan algo de "soporte" y supongan la tabla de salvación de algún alumno.
Tiene sus riesgos; pocos. Y sus sorpresas; alguna más:

Una compañera, en la sala de profesores, ha agitado en el aire, cual abanico propio de estas fechas, un conjunto de papeles heterogéneos, no por las dimensiones -todos tenían el tamaño aproximado de medio folio, con uno de los bordes rasgados- sino por los distintos colores de tinta usada en cada pieza, y la distinta procedencia de los pliegos: cuaderno de cuadrículas, de dos rayas, hojas en blanco, escritos por una o por las dos caras...
Pues bien, tras llamarnos la atención, pasó a relatarnos la conversación que mantuvo con el alumno que le facilitó el amasijo:
- "¿Sabes que la presentación también cuenta en la nota?" (le preguntó ella)
- "¿Sí, maestra...? ¡Pues démelo que se lo voy a grapar!" (le contestó él)
Esa original salida, según la compañera, le completará la nota para conseguir el aprobado

Este hecho, hoy me trajo a la memoria algo similar, pero con algo más de jeta, ocurrido hace unos días:
En mi tutoría tengo un alumno que, si no me equivoco, habrá venido a clase sólo media docena de veces en todo el curso.Todas esas ausencias han sido debidamente justificadas desde casa, y no se le ha echado en falta porque, cada vez que aparecía, se hacía notar.
La semana pasada volvió a hacer acto de presencia. Era la primera hora, y le veo dar vueltas de calentamiento alrededor de las pistas del patio en su hora de EF y pensé: ¿será un fantasma?. Para resolver tan angustiosa duda lo abordé en el cambio de hora:
- Hola, yo sé quién eres tú. ¿Sabes tú quién soy yo?
- Sí, mi maestro...
- ¡Y tu tutor! ¿Te has caído de la cama hoy para venir?
- ¡Qué cosas tiene maestro...! Naa, he venio porque hay que venir ¿no?

Ahí dejamos la conversación. Más tarde tenía clase conmigo... ¡pero no llegó!; a tercera hora la dolía algo y se marchó a casa. Se marchó a casa con algo más de peso en la mochila: el peso del ultra-portátil con su nombre, pagado por la Junta, pagado por...

lunes, 18 de junio de 2012

Lunes 18 de junio

Pocos niños.
Día tranquilo; pocas tensiones
Pero las suficientes, para que dos niñas más se "moñearan"

sábado, 16 de junio de 2012

15 de junio

Una mañana movida:
Talleres de educación ambiental y ceremonia de graduación de los alumnos de 4º. La gente encargada de elaborar y llevar a cabo la jornada, como otras veces, se merecen uno de los múltiples aplausos que se escucharon en el SUM. Incluso las situaciones imprevistas, que en nuestro centro acontecen cada minuto y medio, fueron solventadas con paciencia.

La contrapartida vino del sonido de fondo que adornó la mitad de la mañana: las voces. Procedentes, en su mayor parte, del mismo foco: la jefatura de estudios. Que conste que lo/la vi afanad@ en gran parte de las tareas. Una de las últimas fue la preparación del ágape posterior a la ceremonia, en el gimnasio, con el cuchillo en ristre, manejándolo con destreza, dividiendo porciones.... y me pregunté: "¿se le estará pasando ahora por la cabeza la posibilidad de dividir en porciones la lengua de la compañera de inglés?"
Porque claro; gran parte de las exclamaciones y onomatopeyas vertidas durante la mañana tenían su origen en la discusión con la mencionada compañera, que en la disputa por determinar dónde tenía que estar una alumna, le espetó ¡que era injust@ y abusaba de su poder como si el centro fuera su cortijo!
¡OOOOOOOOOOOH!

No sé qué le hizo más pupa: si las precisas palabras de la profe de inglés, o el espontáneo aplauso de los alumnos

viernes, 15 de junio de 2012

Jueves, 14 de junio

Ayer tenía pensado escribir una miscelánea de pequeñas cosas. Pero a fecha de hoy sólo recuerdo dos llamativas:

La primera aconteció en la guardia: normal; como las ya descritas hasta la fecha. Pero en un aula, que mantenía la puerta abierta para evitar que a los alumnos "les entre angustia", las cosas se alteraron un poco. Tras veinte minutos -laaargos- la compañera de guardia me comentó que la profesora que intentaba hacerse escuchar se estaba encontrando desbordada. Nos acercamos a echar un cable y vimos algo parecido a lo acontecido con la burbuja inmobiliaria: un grito trataba de acallar otro previo, que había sido solapado por otro chillido anterior, que corregía el segundo, que se había elevado sobre el primero.
Conclusión: la burbuja estalla y la profesora se tiene que salir del aula porque "no puedo respirar". Se queda un momento con la compañera fuera y yo me quedo dentro del aula. Los alumnos, al darse cuenta de lo que han provocado, tratan de enmendarlo dándose más voces y buscando consuelo para la víctima: ¡UN SOBRE DE IBUPROFENO QUE UNA ALUMNA TENÍA EN LA MOCHILA! (¡Como lo cuento!)

El otro evento a destacar fue con la clase Excente; o mejor, con la no-clase: sólo había visto un alumno en las primeras horas. Pero cuando me tocó, no acudió nadie. Estaba el aula como si acabaran de pasar las señoras de la limpieza. Me cercioré pese a todo, preguntando a los compañeros. Nadie.
Entré en el aula, cerré con llave por dentro, respiré hondo... ¡y me puse a dar botes, como un niño el día de reyes!

Ya sé: no debería contar estas cosas; un tipo raro

miércoles, 13 de junio de 2012

13 de junio

"¡ PELEA, PELEA !"
Por las fechas en las que estamos, esas exclamaciones encuentran parangón con un gol de la selección española, en un sitio público, que haría a todo el mundo acercarse a la pantalla del televisor.

En este caso he tenido la "suerte" de ver el acontecimiento en todo su apogeo, desde la ventana del aula: uno de los alumnos, siempre más interesado en lo que ocurre fuera que dentro, hizo la proclama pertinente. Yo estaba en la mesa del profesor y sólo tuve que girar la cabeza para ver a dos alumnas agarradas por el pelo. Se estaban "moñeando", como dicen por aquí.
De forma opuesta a la última pelea acontecida entre chicos y de la que salí escaldado, en este caso, cada una tiraba para sí; tiraba para sí de la cabellera de la otra. Y viendo las dificultades de la profesora para separarlas, me acordé de algo escuchado en la radio no hace mucho: hablaba de cuando mucha vida y conflictos se libraban en la mar y saber nadar no era un requisito esencial para poder enrolarse.  Los marineros, entre otras razones, solían llevar la melena larga, por ser la mejor parte de "agarre y tiro" en el caso de caer al agua.

Ahí están las dos, cada una tirando p'a su lado, la profesora tratando de romper la maraña, mano que se escapa y bofetón a la intermediaria
¡Estaba escrito!

viernes, 8 de junio de 2012

Viernes 8 de junio

Hago mías las palabras de los niños al cuarto de hora de comenzar un viaje:
- ¿Falta muchooo?
- ¿Cuándo llegamos?


No doy por terminado este curso.
Hoy he sufrido las consecuencias del (mal) paso que dí ayer:
Ayer teníamos examen en el curso excelente. Sólo nueve alumnos. De algunos conseguí que pusieran el nombre, antes de que el papel saliera volando por las ventanas abiertas. El resto del tiempo los entretuve con fichas para colorear, sopas de letras, completado de palabras, crucigramas de doce palabras.... ¡propio del nivel de secundaria!. Un alumno me completó el examen.
Pero claro; en la clase estaba nuestro "amigo", que no quería hacer nada, ni quería que los demás hicieran algo. Iba en atención individualiza de unos a otros y cuando ya no aguantaban más y les empezaba a entrar la angustia llegaba el momento de salir al baño en la menos caótica forma posible. Pero nuestro "amigo" no quiere ir al baño: cuando se cansó de hostigar al resto quería quedarse en la puerta (abierta) para salir y entrar cuando le viniera en gana. 
Ayer faltó una compañera y uno de los que estaban de guardia se quedó dentro de la clase de la ausente, mientras el otro hacía la "imaginaria" diurna por el pasillo. Como es de suponer y he contado en días precedentes hablando de las guardias, al cabo de media hora había tres alumnos sentados en una escalera y otros dos en la otra. Lo que permitía nuestro sujeto al estar en la puerta, era que los expulsados entraran cuando quisieran a darse una vuelta por el aula, añadiendo más follón al redil que trataba de controlar. Prometo  por lo que merezca la pena prometer, que nunca en mi vida he usado más centenares de veces la expresión "por favor" de lo que la he usado en estos meses. Nuestro "amigo" no entiende su significado: quería estar allí y punto. Y eso alegraba más al resto para hacer lo que ell@s quisieran. En ese momento no vi más recurso que agacharme un poco, hacer el "abrazo del oso" y moverlo de su ubicación, hacia dentro del aula.
- "¡Tú no eres mi padre, mierda. ¿quién te ha dao permiso p'a empujarme..!"
 Me quedé en la puerta sujetándola y al ver que no podía abrirla, lo intentó quitando los pestillos. Y al ver que tampoco conseguía lo que quería dio unas cuantas patadas a lo que tenía al alcance.... ¡y sonó el timbre!

¡Bien, he superado la prueba! (eso creía) ¡un día menos!
Pero hoy me esperaba: los viernes solía acudir una persona que le hacía una terapia, no sé de qué tipo. Se habrá acabado el ciclo o la persona no vino. La terapia fui yo.
Podría dedicar muchas líneas al desarrollo de la hora. Pero me quedo con las palabras de uno de los alumnos que se ha pasado gran parte del curso expulsado: 
- "Este es así porque no le han dao una buena hostia en casa"

Yo ya no sé nada (si alguna vez he sabido algo de educación) y tampoco me queda mucha paciencia
No me dejaba (a mi) moverme por la clase, porque no le dejé (a él) hacer lo que quería. Buscaba que lo empujara y al final lo consiguió.
Sonó el timbre y recorrí la clase con él a mi espalda:
- "Mierda, que eres un mierda, a mi no me vuelvas a tocar que no eres mi padre. Gilipollas, me cago en tus muertos. Así te mueras tu también...." No recuerdo ya con cuantos insultos por metro cuadrado me adornó. Pero cuando estaba ya cerrando la puerta me dirigí a él:
- " Dentro de muy poquito yo me iré. Y tú te quedarás en esta mierda, con tu mierda"
No creo que me entendiera y tampoco me preocupa.
Ya no quiero partes; no quiero ver a sus padres por aquí. 

Me he acercado a la tele. Están echando en la Sexta3 "Tres colores: Azul". Un respiro

miércoles, 6 de junio de 2012

Miércoles 6 de junio

Creo que a veces me olvido de prestar a las guardias la atención que se merecen.
Porque me he acostumbrado también a ellas.
Unas guardias en las que palabras de la familia, como "defensa", "custodia", "protección"... alcanzan su justo término. Ya me avisaron, allá por el mes de septiembre (¡dioses míos parece otra vida!) que las horas de guardia de este centro, eran guardias "estricto sensu": de pie, dando vueltas al pasillo elíptico, controlando movimientos sospechosos, percatando olores nocivos, dirigiendo a l@s descarriad@s de nuevo al redil.

Los niños están mejor en el centro que en casa
No quieren estar en clase; quieren que se les expulse.
El aula de expulsados hace pared - de pladur - con el laboratorio: tampoco los puedes tener allí cuando el laboratorio está ocupado, como ha ocurrido hoy
Es fácil de imaginar la "guardería" de adolescentes en que se convierten la escalera y el pasillo

Conclusión: el maestro aguanta y aguanta ... a que un día aparezca "El Tío de la Vara"

lunes, 4 de junio de 2012

4 de junio

- Jornada de reflexión III -

"Coste cero", "gratuidad", "no se puede pedir nada a los padres"
Expresiones como estas son las que se han oído en el claustro de hoy. Y ya empezamos con "el huevo y la gallina"; lo que damos y recibimos; lo que nos van a quitar y no podemos gastar...

El curso pasado un compañero joven - hablo de 29 años - pero con la cabeza, en mi opinión, bien asentada, decía que los centros educativos tienen que volver a ser sitios donde se exija, no donde se vengan a exigir.
El principio de educación pública y gratuita no lo discute nadie (al menos yo) pero ambos conceptos, lo "publico" y lo "gratuito" están distorsionados hoy en día. Seguro que todos conocemos ejemplos - sin ceñirnos exclusivamente a la docencia - que han contribuido a esa deformación. Corregir eso y educarnos "en lo público" nos forma también como personas dentro de una sociedad imperfecta
- ¡qué bien me ha quedao! -
Me duele la lengua de decir a mis alumnos que parte de la luz que dejan encendida, el grifo que dejan corriendo, la silla que queman, el libro que mal usan... ¡lo pagan sus padres!
- "Mi madre no paga ni una factura que le llega..¡va a pagar esto!
Es la mayor reflexión que he sacado en todo el curso. Algo que ven en casa y que traen al centro...¡junto con sus Blackberries!

Así nos quedamos con educación publica, gratuita y exigible, que no exigente

viernes, 1 de junio de 2012

Viernes, 1 de junio

¡Comienza el último mes!
Sólo deseo que no se haga tan largo... como aparenta que va a ser

Vinieron los padres de la criatura y entre la tutora y yo nos repartimos "las tortas". Me aconsejaron no estar solo y fue un acierto:
En un principio la compañera comenzó atacando y me pilló descolocado. Luego lo entendí: se llama "experiencia de batalla". Tenía pensado levantarme e irme en cuanto el/la angelit@ comenzara a negar cosas. De hecho me puse en pie a las primeras de cambio pero la compañera, sabiamente, siguió con su estrategia y cuando el/la pupil@ se vio acorralad@, se marchó dando un portazo.
- Hace lo mismo en casa (justificó la madre). Pero ella también traía preparado su armamento y comenzó a lanzarlo: Que es un/a niñ@ especial y aquí no sabemos tratarlo, que nunca había dado problemas antes, que mis clases no se dan como se debería, o por lo menos, como ella recuerda que se daban, que su retoño al final siempre le cuenta la verdad, contrastada, por supuesto con los amigos de la criatura, etc, etc.

Cuando la compañera tuvo que volver a su clase (desde aquí le doy las gracias a ella y al compañero de guardia) no me quedó más remedio que acudir al padre -¡sí, el padre también estaba allí y se ruborizó cuando su hij@ se largó de aquella manera!- Me habían comentado que era de carácter pusilánime, pero a lo mejor sólo es como yo: un güevazos y un flojo, como me han tildado en este centro. Quizá su falta de ánimo para tolerar la situación familiar, es similar a la mía para tolerar la situación profesional; y esa empatía momentánea me hizo dirigirme a él para cortar el monólogo de la madre:
- ¿Usted no tiene nada que añadir?
Dijo que no. Y aquí su mujer le dio la puntilla con una mirada que echaba rayos:
- ¿No tienes nada qué decir??
Y él volvió a negar.

Me levanté y dí por concluida la reunión

jueves, 31 de mayo de 2012

31 de mayo

Hay una sensación de "barra libre" cuyas consecuencias, lógicamente, son impredecibles.
Hoy creo, que todos los compañeros, sin excepción, han salido escaldad@s. Porque los alumnos, que en estas fechas están pasados de rosca, enseguida perciben que los partes son papel mojado y claro, lo que hace dos días la jefatura de estudios calificaba como "gilipolleces" ("llama a sus casas y apáñatelas con sus familias porque no se les va a expulsar"), se ha tenido que desdecir. Mañana, cuando tramite la expulsión me enteraré de lo acontecido.

Pero antes, como en otras tantas ocasiones, tuve mi propia ración de heavy metal:
En el curso excelente, las técnicas de supervivencia rozan el malabarismo más absoluto: tenemos un/a alumn@ que, pese a todos los diagnósticos que trae en su mochila, hay que acerl@ convivir con el resto de la clase. Y aquí no se trata de:
- ¡Niñ@ siéntate!
- ¡Niñ@ deja de hablar e interrumpir la clase!
- ¡Niñ@ duérmete un poco si quieres, escucha música, haz un dibujo, sal a relajarte un poco...piérdete!
¡No, no! aquí se trata de:
- ¡Niñ@ bájate de la mesa!
- ¡Niñ@ bájate de la ventana!
- ¡Niñ@ no tires la silla, no tires el borrador contra la pizarra, no rompas el libro, no tires el zumo al suelo...!
No oye y mucho menos escucha. Y las pocas veces que lo hace, es para ejecutar exactamente lo contrario de lo que le pides por favor. Lo llaman "conducta anti-social". Muy bien

Sabiendo que no podía intervenir contra el/la piróman@, decidí centrarme en "humedecer" la zona de influencia: un alumno me hacía dos ejercicios pendientes del día anterior. Otros dos, tras hacer una ficha, les dejé jugar al tres en raya. Otros, con tiempo controlado, les dejaba salir a fumar al baño para relajarse, según ellos (¡NUESTROS ALUMNOS SALEN A FUMAR AL BAÑO! ¡AY DIOS, NO CREO LO QUE ESTOY ESCRIBIENDO!) otra escuchaba música, otra comía un bollo que le compré porque no había desayunado (eso me lo creo) y otros dos pintaban (otras fichas) y hablaban de sus cosas.
Yo iba de un grupo a otro ayudándoles o distrayéndoles de las llamadas de atención del/de la piróman@. Pero claro; una hora es muy larga y no tengo el don de la ubicuidad, así que uno de los relajados, se cansó de las llamadas de atención y se armó la marimorena: el/la incendiari@ se llevó unos cuantos tortazos que no pude evitar.

Mañana vienen sus padres; ¡a ver cuántos tortazos me llevo yo!

martes, 29 de mayo de 2012

Martes 29 de mayo

"Es un perífrasis verbal, ¿verdad maestro?
Me apoyé en la pizarra porque era el lugar más próximo.

Tardé un segundo en recuperarme del vahído, sonreír y felicitar al alumno. L@s directores de escena en una obra de teatro quizá habrían acudido a un cenital sobre la cabeza del alumno, junto a una melodía celestial, que daría al cuadro un carácter divino, como de una revelación. En tal estado de gozo me puse estupendo y les dí  un positivo a los once alumnos que estaban en la clase

O quizá todo es consecuencia de algo más sencillo:

Estaba explicando el pasado continuo y como he dicho, a un alumno se le ocurrió enlazar esa  construcción verbal durativa con su homóloga española. Desde aquí felicito también a su maestra de lengua (otra "compañera de lengua más"; son todas del sexo femenino en el departamento) y paso a mencionar el tercer motivo por el que creo, que han surgido estas gratas sorpresas:
Ayer, a no se quién, se le ocurrió difundir que hoy había huelga de alumnos. Imagino que la original idea se le ocurrió a uno de ell@s. Como resultado, aquell@s que sólo necesitan un ligero viento del norte para no acudir al centro (o para armarla) no han acudido. ¡Y no sólo en la clase mencionada, sino que en otras dos, he avanzado más en la jornada de hoy que en toda una semana!

Como no hay cal sin arena, mientras le estaba contando -pasado continuo- a la jefatura de estudios un asunto sobre dos alumnos de mi tutoría que estaban campando a sus anchas por el centro, se acercó la compañera de EF para comentar la adquisición de nuevo material (un saco de boxeo) y desviando la atención hacia ella comentó algo así de que "vendría muy bien para las gilipolleces que yo le estaba planteando...."

Dejé de escucharl@

jueves, 24 de mayo de 2012

24 de mayo

Con el calor, el fuego del frente arrecia. La artillería pesada se intensifica:

- "Si no fuera maestra, le escupía en la cara"
Estos esputos verbales fueron dichos, precisamente a la cara de la maestra de lengua, a la puerta de su clase y yo pensé: seguro que si fuera una persona, en vez de una maestra, le escupía.


Pero eso aconteció en la guardia. Ya un rato antes, a tercera hora, en mi clase, un alumno se refirió al de naturales como "calvo cabrón y asqueroso". Lo repitió tres, cuatro veces y ante mi curiosidad por ese enojo manifiesto hacia un compañero, el interpelado dijo que le había "agarrado del brazo para meterlo en el aula"; ¡acabáramos!: nuestros pupilos no aprenderán un poquito de matemáticas, inglés, sociales... no aprenderán a escuchar o a respetar un poquito... Pero hay algo que ya saben: ¡qué no les toque nadie! (que ellos no quieran). Ya en el recreo, comentado al "maestro agresor", sabiamente, y para un mayor desprecio, no hizo aprecio.

Siguiendo en el área de insultos, al compañero de sociales, en su momento, sí le importó que se cagaran en sus muertos y acudió a la jefatura de estudios buscando el desagravio, sabiendo que, por mucho menos (recordemos que estamos en la esfera de la vulgaridad) un/a alumn@ fue expulsad@ hace un mes: llamó a la mencionada jefatura "¡berrugos@!". La respuesta a su demanda fue:

- "Es de una familia peligrosa y me riega muy bien el huerto... así que me lo llevaré a regar" 
(¡TO-MA-CAS-TA-ÑA!)

Pero hoy no puede despedirse el diario sin reseñar la buena nueva, la presencia del ente esperado durante este difícil adviento: ¡HOY POR FIN HA VENIDO LA INSPECCIÓN!
Y lo más destacable es que la conserje ha gastado medio bote de ambientador en el hall de entrada. Repito para los/las incrédul@s: ¡ambientador a tutiplén en el hall!


¡"Bienvenido Mr Marshall" es la verdad absoluta!

miércoles, 23 de mayo de 2012

Miércoles, 23 de mayo

Me voy a permitir otra jornada de reflexión


Antes de nada y después de todo, quiero señalar, si no se ha deducido de este diario, que el valor más importante del centro en el que me encuentro este año, son l@s compañer@s. Lo recalco, porque no sé si lo llegué a escribir en otro momento, pero es en las dificultades, cuando te das cuenta de la madera de la que están hechas las personas. Sin lugar a dudas, en el improbable e hipotético caso de que tuviera que formar un equipo docente, ¡escogería a tod@s sin lugar a dudas!; viendo lo que pueden hacer en la trinchera, serían el mejor grupo, con experiencia, para llevar a cabo un proyecto educativo. 

Pero ayer, muchos, más de la mitad, fueron inteligentes. Y listos:

Después de que el equipo directivo enviara, de forma oscura y subrepticia, una circular a los padres para que no enviaran a sus hijos al instituto, estaba claro que acudirían pocos, muy pocos, como así ocurrió. 
Me imagino una jornada relajada, sin el stress cotidiano, con algún café y algunas risas, con un ponerse al día de cosas, con un respiro..
Fueron inteligentes. Y list@s.

Son algo más de ochenta euros que la administración ya no se queda... de cada uno de ell@s. De hecho, nuestro trabajo es el instituto está mal pagado y peor reconocido; para un día que se podían tomar la revancha...
Fueron inteligentes. Y list@s.
- Aquí, hablando de dinero, me gustaría hacer un inciso: creo que han sido un grupo de "listos" a nivel mundial (nacional, regional..) los que nos han llevado a la situación actual que padecemos -


Sigo:
Algun@s, que en un principio no iban a hacer acto de presencia, se presentaron. Es un derecho constitucional, no una obligación; sólo tenían un par de horas y no compensaba...
Fueron inteligentes. Y list@s

Otr@s tenían "motivos personales", respetables como los de cualquiera y buscando "personal" en el diccionario, resulta una definición, casi antónima, de "solidaria" . El noventa por ciento del claustro somos interinos, estamos en precario y lo estaremos más. Pero la protesta de un día no hace nada
Fueron inteligentes. Y list@s

Por supuesto, vuelvo al comienzo: nuestro centro no es "normal" y desde ese prisma hay que mirar todas las relaciones personales. Sólo he tratado de hacer un ejercicio de empatía.

No soy inteligente. Y mucho menos me considero un listo
Por eso ayer hice huelga

lunes, 21 de mayo de 2012

Lunes 21 de mayo

Mañana haré huelga.

Podría dar las noventa y ocho entradas de este blog como razones. Pero me resulta más fácil decir, que no me gusta el "futuro regresivo", ni para mí, ni para los que me rodean.

http://www.yoestudieenlapublica.org/





viernes, 18 de mayo de 2012

Viernes 18 de mayo

Interesante ha sido mantener una conversación con una compañera al acabar la jornada, en el centro, porque dentro de muy poco no nos pagarán el tiempo que le dedicamos fuera del centro; tiempo que no existe.
Vuelvo al "interés" de la conversación, porque tenía una visión distinta, y eso siempre ayuda. Coincidíamos en lo básico:
- Nuestro alumnos traen una pesada "mochila" familiar detrás
-El equipo directivo es el que se queda al final en la trinchera de este campo de batalla y eso marca un carácter.
Todo esto es algo que ya he mencionado en este blog y en momentos me ha ayudado a entender -que no compartir- el absurdo. Pero eso no justifica todo y aunque ella dice que prefiere un equipo docente "directo" en vez del sibilino y vago del curso pasado, no se trata de comparar lo malo, para ver qué es peor.
También afirmaba que a la jefatura de estudios le sirven las voces; le dan resultado. Craso error y al final ella lo admitió: sirven, en mi opinión, si es que de verdad sirven, para un caso muy puntual y concreto. No como medio sistemático de relación con las personas; porque nos mete a los alumnos y al profesorado en el mismo saco. Eso, sólo provoca crispación, además de minar la autoridad del docente.
Hablando del/de la susodich@, hoy me salpicaron sus rimas soltadas al aire:

Hay prevista una huelga en el sector de la educación para el próximo 22 y ayer, al ver en la sala de profesores una lista de compañeros que la iban a secundar, la borré porque ni está bien escribirla, ni es legal. Sé que en un centro como el nuestro, hace falta algo de previsión para que las cosas no se desborden, pero hay otras vías, ya probadas, de gran eficacia, como dejar "caer" entre los alumnos, la existencia de esa jornada de huelga. Mucho más eficaz incluso, que remitir algún escrito a la familia.
Pues bien: lo que ocurrió ayer lo resolvimos de una forma más o menos jocosa ("¡como te vea borrar de nuevo la lista, te corto la mano!) y no lo reflejé en el diario. Pero hoy, cuando llegué, la lista no estaba; alguien la había borrado. Pensé incluso, que había sido él/ella, después de una noche de reflexión. Pero no: entró en la sala de profesores y al percibir la ausencia de la mencionada lista se me lanzó:

- TÚ -dirigiéndose a mi- ¿YA BORRASTE DE NUEVO LA LISTA?.
(Negué con la cabeza)
- Pues si no has sido tú, seguro que se lo has mandado hacer a alguien.
Le comenté -pero no me escuchó- que ya somos todos mayorcitos, para que nos digan lo que tenemos o no tenemos que hacer. Y empezó a largar, como sólo ella/él sabe hacerlo.
Ya al final, cuando volvía a su despacho, dio media vuelta para espetar:
- ¡Y tienes un cuerpo muu chico para tan mala leche!
Lo repitió cosa de tres o cuatro veces delante de l@s compañer@s, no dejándome otra salida más que la sutil ironía de don Latino de Hispalis:
- Desde luego, todo en tu boca es canción

Se alejó diciendo no sé qué...



jueves, 17 de mayo de 2012

17 de mayo

El tema de hoy se ha centrado en el mobiliario. Hoy, al estilo IKEA, toca la sección "persianas":

Porque nuestros "angelitos", cuando suben las persianas de sus aulas, no las suben: simplemente prueban a ver, si  del tirón, las sacan de su marco. No son tod@s, pero sí es una moda muy arraigada.

Pues bien: en el curso excelente, como no podía ser de otra forma, hay (perdón; había) una persiana que no sólo se había salido de sus raíles, sino también del tambor. Y estaba caída, de lado... creo que durante más de tres semanas. Hoy, a un alma cándida se le ocurrió que una persiana caída no servía de ..." ¡si no se sube, se parte!" (parece que fueron sus palabras) y eso fue lo que hizo: la partió (imagino que de una patada) y la tiró por la ventana fuera del aula. Curiosamente -¡cómo me puedo llegar a sorprender!- la jefatura de estudios cargó la culpa sobre la compañera que "debía haber estado en ese momento en el aula".
Lo dice con tanta vehemencia, que a veces pienso que de verdad se cree lo que dice, sabiendo (porque lo sé), que si en un cambio de hora, yo estoy, por ejemplo en el baño, y una de nuestras criaturas agrede físicamente a otra causándole un daño tal, que ponga en riesgo su vida, el fiscal, lo más que llegará a preguntarme, es si me lavé las manos después de ir al baño.

Hoy se han acabado las "pruebas de diagnóstico" y el diagnóstico del "enfermo" ya me lo sé:
"RESERVADO"

miércoles, 16 de mayo de 2012

16 de mayo

"¡Maestro, maestro...!"
Camino del centro a eso de las 8:15, oigo que me llaman. Doy media vuelta y me encuentro a uno de los alumnos implicados en la pelea, con un brazo en cabestrillo, dirigiéndose hacia mi:
-"Maestro, ¿tu fuiste el que nos separaste? (asiento con la cabeza) ¡pues mira lo que me pasó a mi por separarnos: que en vez de darle a él le di a la pared! Y ahora ¿qué maestro? ¿yo que hago? ¿mire cómo estoy por su culpa? El próximo día, cuando lo mate, no se meta... 
Le respondo que sí, que no es una mala opción, pero que se maten fuera del centro. 
Pensándolo bien, teníamos que haber ido dos a separarlos, para no dejar al otro en desventaja, pero no me dio tiempo a pensar en ello..... ¿SERÁ POSIBLE QUE ESTÉ HABLANDO DE ESTO??

-Corramos un tupido velo-


Hoy ha sido un día laaargo para much@s: entre la cuarta y quinta hora vi entrar con la cara desencajada (eso me pareció) y resoplando a la compañera de EF en la sala de profesores. Pero de igual manera acabó la jornada la de Sociales. Sé que me podría nutrir de mucha información, si al acabar la jornada, me quedara en el "corralito" que forman un nutrido grupo de profesores a la puerta del instituto; con o sin cigarro, echan fuera parte de lo vivido (¿sufrido, quizás?) en las aulas. Pero tampoco creo que se trate de llenar este diario de cosas escabrosas. Para eso ya están los medios de comunicación actuales.
Por cierto, esos mismos medios han anunciado hoy la "dieta de la cebolla" -porque nos van quitando capas- que nos aplicarán en breve y yo pienso: si los compañeros dicen que el curso pasado en el centro fue mucho peor que este en el que estamos. Y si las condiciones de trabajo del próximo año van a ser peores que las actuales, me pregunto: ¿existe el "futuro regresivo"?
Se lo tengo que preguntar a mis compañeras de Lengua

martes, 15 de mayo de 2012

martes 15 de mayo

"Hoy la jefatura de estudios se va a portar bien; hoy va a ser buen@, ¿no?"
A esta pregunta irónica de una alumna sólo pude responder con una sonrisa y otra pregunta del mismo tono: ¿Por qué?
¡Hoy venía la INSPECCIÓN!.

Pero antes ocurrió algo:
A primerísima hora ya estaba el equipo directivo al completo tratando de marcar la disciplina de la jornada: "¡mucho silencio en los pasillos y los cambios rapiditos! ¿de acuerdo?" (¡A sus órdenes!).
Metí a los pocos alumnos de mi clase dentro y salí a esperar la llegada de algún rezagado que pudiera venir en el autobús escolar. A escasos dos metros de donde me encontraba un alumno que iba a su clase le increpa algo a otro y éste se lanza a por el primero. Es curioso que ahora esa escena la recuerdo muy lenta....¡hasta que se agarraron!, luego todo fue muy rápido: se unieron como lapas; me costó encontrar un hueco donde meter la mano y poder separarlos. Cuando lo conseguí, el que tenía agarrado me pedía (como siempre) que lo soltara que no sé qué le iba a hacer al otro...¡y apareció la jefatura!:
- ¡A VER QUÉ PASA AQUÍ! ¡Vosotros dos (a los alumnos) venid conmigo!, y tú (ahora se refería a mi) ya me explicarás lo que ha pasado, que no me canso de repetir que no se puede llegar tarde a clase! Ya salí salpicado sin buscarlo. Los alumnos (uno de ellos con una brecha) tardaron escasos veinte minutos en ser expulsados
Un manotazo sí me llevé en el cuello; heridas de guerra, que luego se quejan los alumnos de mi falta de implicación en las peleas. También alguna risa de mi compañera de departamento: "parecía que estabas en el Pressing Catch"

 Como otras veces, al final la inspección no se presentó



jueves, 10 de mayo de 2012

10 de mayo

La guardia de hoy me ha dado un punto nostálgico; quizá un inconsciente bálsamo que me ha llevado a la niñez, cuando todos hemos tratado de parar un arroyo de agua con el pie en un día de lluvia. Al final se desbordaba por todos lados y te empapabas  los calcetines. Con las "catiuscas" no te mojabas, pero tampoco conseguías lo que buscabas

Hoy, no llevábamos más de diez minutos de guardia cuando se produjo una repentina "inundación" de alumnos saliendo de sus aulas:
- "Me voy porque a esta maestra no la aguanto..."
(Como ha salido de clase dando un portazo, imagino que ha entusiasmado a otro que sale unos segundos después, dando el mismo portazo)
- "¿Y a ti qué te pasa?" (pregunta mi compañera)
- "Que la maestra se ha "emparanoyao" y dice que va a llamar a mi casa...."
De otra clase sale otro alumno (hoy han sido todo chicos) que dice que se agobia porque tienen la clase hecha una guarrería (su clase) y no echan la culpa a los culpables ahora "que él no ha hecho ná". Le acompaña su amigo de parranda, quejándose de lo mismo. El profesor del aula trata de seguirlos pero se oye mucha bulla dentro de clase y le decimos que nos encargamos nosotros.
Ya van cuatro
Decidimos ir a por la llave del aula de expulsados. Un poquito antes o después, de la primera aula sale otro más, quejándose de "la maestra loca, que le ha dao por poner partes a toos"
De una tercera aula ha salido otro mozo cinco minutos "p´a relajarme un poco. ¡Y no me haga entrar maestro, que la armo!"

He de admitir que fue un "torrente" de comienzo y no sé muy bien cómo, las cosas se fueron calmando (no siempre ocurre así; quizá fue la sonrisa floja que me entró ante la avalancha) y unos subieron al aula de expulsados, otros volvieron a clase al cabo de un rato y con dos más me quedé sentadito en la escalera, hablando... de sus cosas; nada que ver con la lluvia o los charcos.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Miércoles 9 de mayo

Al acabar la jornada he visto a algún compañero extenuado.
Sin notables casos a que reseñar, ha sido un constante desgaste de pequeños retos, creo que en todas las clases y a casi todas las horas.

Y si lo pienso dos veces, creo que también mi percepción ha cambiado; la supervivencia me impone la impasibilidad. Por ejemplo, como ocurrió la semana pasada, las peleas ya no me alteran.; dos, tres por día de media, te aguzan la vista para determinar:
- Si empiezan de broma y se quedan ahí
- Si empiezan de broma y se tornan serias
- Si no hay bromas
Da igual la gravedad, en todas tienes que determinar el peligro del daño que se pueden hacer a ell@s, al resto de compañeros, al mobiliario, a ti mismo... ¡en cuestión de un par de segundos!. Si decides intervenir y separar el conflicto no te esperes otra cosa distinta de:
-"¡Maestro, no me reempuje que yo no respondo!"
(¡Tranquilo hombre/mujer; sólo trataba de evitar que no te sacaran un ojo!)

Otro elemento que ayuda es la relación con el equipo directivo: vamos en la misma dirección (valga la redundancia) pero en distinto sentido, así que de momento, nos evitamos; al menos yo.

Ayer vi llorando a una compañera en la sala de profesores. Los pocos que estábamos allí ya nos estábamos haciendo cruces tratando de adivinar los motivos. Además, el ver llorar a alguien mayor que yo me rompe un poco más.
Tras un par de horas, la note más calmada y me acerqué: son motivos personales que la tienen al borde del llanto. Pero siempre hay una gota que colma el vaso: los insultos que le "regalaron" los alumnos de 4º

lunes, 7 de mayo de 2012

7 de mayo

Como señalé la semana pasada, los días de descanso, según se acerca el final de curso, son tan necesarios como rompedores. Todavía nos quedan cuatro a cinco lunes; cruzaré los dedos.

Muchas voces, carreras, portazos... pero si hay que destacar algo es a la alumna del síndrome "no quiero" de quién hablé también hace unos días. He tratado de evitar el parte hasta el final, hasta que no me dejó más salida. Algo que tampoco la calmó después:

Empezó la clase hablando a voces por la ventana:
- "Chochi... espérame luego, ¿vale?"
Se ve que le respondieron con un verso libre desde el patio y ella lo completó..
- " ¡Tu puta madre!"
Se sienta, me mira y dice:
- "¡Ya está maestro, ya me siento!"
Falso; a los treinta segundos estaba de nuevo en pie porque tenía calor, porque la mesa estaba sucia, porque quería ir al baño... Se volvió a sentar y puso las piernas encima de la mesa. ¡Mi visión de la suela de sus deportivas era perfecta!. Le llamo la atención, le digo que se siente bien:
- "¿ Maestro, le molesta?
- "" (caigo en la trampa)
- "¡Pues tire de ésta! ¡Y si le sigue molestando, pues siga tirando!
Grandes risas

domingo, 6 de mayo de 2012

3 de mayo

Hoy una compañera me ha relatado un evento acontecido en mi ausencia:
Al final de una jornada en la que había faltado más de un profesor, una compañera que se encuentra sola y trata de evitar que no salga del centro un alumno, la policía que aparece y trata de ayudar a la profesora, el alumno que se pone bravo, la policía que acaba dentro del centro (cuando parece ser que sólo la dirección puede autorizarlo), la jefatura de estudios que también se pone brav@ porque es la hora de salida y no quiere que se vea "a las fuerzas del orden" dentro del instituto.... Lo acontecido tuvo más detalles, pero fueron confusos y no puedo narrarlos bien en este espacio.

Si quiero traer a colación a la compañera que me lo contó, es por ser la segunda persona (la otra es un compañero) que estaría dispuesta a volver a este centro el próximo curso; a repetir experiencia. Me resulta curioso, porque les he escuchado quejarse de cosas similares, sino peores, de las que a mí me han acontecido.

Supongo que una vacante para todo el curso, tal y como está la situación actual, es tentador. Pero yo no quiero este caramelo envenenado. Y supongo que tendrán otros motivos personales, familiares... que también estarán en las antípodas de los míos.
¿O quizá se han acostumbrado? Un peligro del que ya advertí al comienzo de este blog

miércoles, 2 de mayo de 2012

Miércoles 2 de mayo

En días como el de hoy uno no sabe si el descanso que otorga el puente compensa las condiciones en las que vuelven los alumnos; algunos de ellos, directamente se asilvestran:

La primera hora fue tranquila. Pero ya en la segunda, una alumna empezó a mostrar síntomas del síndrome "noquiero": No quiero sentarme, no quiero callarme, no quiero dejar de asomarme a la ventana, no quiero cambiarme de sitio, no quiero no ir al baño... (¿he mencionado ya el "no quiero trabajar un poco"?). Sorprendentemente no se llevó ningún parte: conseguí apaciguarla y empleó el mayor tramo de la clase en hacer dibujos.

Fue en la tercera hora donde la cosa tomó color: un/a alumn@, cuando llevábamos diez minutos de clase, le coge el móvil a otr@ alumn@. El/la otr@ se lo pide y el/la primer@ no se lo da. Se levantan y empiezan a rivalizar por el móvil medio en broma. Empiezan a empujarse medio en serio. Empiezan a darse en serio, sobre todo el/la primer@, que en un ataque de "afecto" por su compañer@, le clava un lapicero en el hombro.
Conclusión: el/la primer@ expulsado otro par de semanas y el/la otr@ al centro de salud para que le extraigan la mina del lápiz.

Me recriminó una alumna, por qué no había ayudado a separarles/as. Bueno.... sí.... quizá la próxima vez

martes, 1 de mayo de 2012

27 de abril

Hoy el día comenzó con un mal augurio: el/la profesora de matemáticas había visto en la puerta de entrada a un/una alumn@ del curso excelente que se incorporaba tras la expulsión. Junto con otros dos alumn@s del mismo curso, ya "asumid@s" tras un largo período expulsados, forman un tridente que pone a prueba la pericia en manejar recursos educativos... y en manejar el cortisol!

Pues bien: en el cambio de clase de segunda a tercera hora, veo en el hall de entrada, al/a la mencionad@ alumn@, rodead@ de personas (familiares, supongo), llorando y escuchando (o haciendo como tal) la reprimenda de la jefatura de estudios. Durante el recreo, me cuentan que ha vuelto a ser expulsad@: parece ser que, en un arrebato de alegría y regocijo sin control, al ver a la jefatura de estudios a través de la ventana de clase, se puso a gritarle insultos, jalead@ por otros compañeros de clase.

Posteriormente, la clase con el curso excelente fue bastante tranquila.
No es bueno, creo, que la suerte de un día de trabajo dependa de cosas como esta

jueves, 26 de abril de 2012

26 de abril

Hoy ha habido una excursión que ha dejado el centro a más de medio gas: cuatro alumnos en una clase, dos en otra, ninguno en la tercera... Buen momento para ordenar papeles, preparar exámenes y conseguir enterrar el hacha de guerra de una alumna; al menos conmigo.

El ambiente distendido ha dado pie a la jefatura de estudios a distendirse también él/ella en la sala de profesores, creo que a raíz de un comentario del concurso de traslados. Según sus palabras, le da igual si le envían profesorado fijo o interino, porque según su experiencia, "las canas no son determinantes para cuajar en el centro". Y acto seguido dedicó más de 40 minutos a contar "esas experiencias":
Salvando los primeros minutos, dedicados a congratular a un profesor que "a base de empeño y constancia se hizo con el grupo.." dedicó el resto del monólogo, a veces interrumpido por algún compañero, a soltar lindezas del estilo:
Que durante mucho tiempo pensaban que una profesora desaparecía durante su hora de guardia y al final se dieron cuenta que se escondía a dormir en el despacho de orientación....
Que otra profesora tras numerosas bajas se enfrentó a la inspectora del momento porque quería un traslado a otro centro y como tenía un familiar que era abogado...
Que un profesor se dedicaba al exhibicionismo en sus horas libres, y en las que no también, y una vez le vio las nalgas depiladas...
Que un administrativo era bipolar y...

Creyéndome sólo la mitad de lo que dijo, me pregunto, qué culpa puede recaer en el centro para que las personas puedan llegar a cometer excentricidades

El próximo 28 es el Día Mundial de la Salud Laboral y por prescripción médica debo mantener la tranquilidad en el trabajo. Ayer, de la forma más tranquila posible, en el curso excelente, conseguí separar ocho veces a dos alumnos que se estaban incordiando: como he dicho, separándoles, ayudándoles con la tarea, distrayéndoles con la pizarra digital... pero al final cayeron una mesa y acto seguido una alumna tiró una silla, y dos segundos después sonó otra tercera (¡qué juego tan divertido!). Les comenté (a los peleones) que eso era el resultado de toda una hora de batalla y que les escribiría un parte. Uno de los susodichos salió de la clase dando un portazo y llamándome "gilipollas" . Es la segunda vez que me lo llaman en este curso y empiezo a creer que en verdad se me debe quedar cara de gilipollas cuando me veo impotente.

miércoles, 25 de abril de 2012

Lunes 23 de abril

"La vida sigue igual...."  Me suena a Julio Iglesias

De golpe he visto una pared a escalar y me ha dado un "vértigo invertido" que no sé si existe: en vez de mirando el abismo, por ver la distancia que tengo cuesta arriba. Fue la primera sensación y he de considerarlo como algo normal; ¿dónde pensaba yo que volvía?

Llegué unos minutos antes del comienzo del recreo y me pilló un poco el follón así que los primeros saludos del reencuentro fueron rápidos. Me llamó la atención que el/la compañer@ con quién más he estado en contacto me diera la bienvenida de pasada. No le dí mayor importancia. Cinco minutos después me encaminé a la cafetería que está cerca del centro y allí estaba sol@. Se disculpó: acababa de pasar por la agradable experiencia de sentir muy de cerca el aliento de un/a alumn@ que amenazó con darle un tortazo. Por eso, según sus palabras, necesitaba salir "a respirar y llamar a mi pareja por teléfono para desahogarme un poco. En los últimos análisis, la hormona del stress la tengo por la nubes!"; comprensible.

También me ha comentado que el equipo directivo fue denunciado en el segundo trimestre; comprensible.

El/La administrativ@ no se ha incorporado; comprensible.

miércoles, 21 de marzo de 2012

Jueves 19 de enero

He recibido un e-mail de un/a compañer@ del isntituto.
Transcribo literalmente el último párrafo:

(...) " Por el IES, todo sigue tan pacífico y armónico como siempre: las peleas entre el alumnado siguen su ritmo habitual de 5 ó 6 al día; la voz de grito armoniosa de la Jefatura de estudios sigue retumbando en nuestro tímpanos cual canto espiritual de los pajaritos; los partes de expulsión continúan siendo el pan de cada día para nuestros alumnos y, la liberación, para parte de nuestro compañeros... En fin, como puedes observar, todo sigue  su curso, nunca mejor dicho"

lunes, 19 de marzo de 2012

23 de diciembre

Vacaciones escolares de Navidad

¡Qué cuando peor estemos, sea como ahora!

Jueves 22 de diciembre

Hoy ha sido un buen ejemplo de que todo es relativo (también está en el fondo de este diario, para cuando me encuentre -eso espero- en un mejor centro):

He comido con dos compañeros del curso pasado. Parece ser, según me cuentan, que en el último claustro de su centro hubo "algo de tensión" debido al tema de las competencias, las horas de coordinación, la calefacción en las aulas.. incluso a J... (uno de los profesores con los que pude disfrutar el ágape) un alumno le amenazó mientras le estaba poniendo un parte y ¡J... le ha puesto una denuncia!
¡Cuántas tendría que haber puesto yo hasta la fecha!

martes, 13 de marzo de 2012

Miércoles 21 de diciembre

Muy tranquilo: cada vez faltan más niños y las clases están dedicadas, según el número de asistentes, a actividades variadas: desde un liviano repaso de algo que les viene bien, hasta villancicos, crucigramas, juegos, karaokes... en inglés, pero "sin forzar la máquina" porque enseguida se cansan y necesitas tener otros recursos.

No voy a participar en la cena de Navidad, ni he formado parte del "amigo invisible". No tengo el cuerpo, ni la cabeza puestos en estos eventos de "buen rollo"

En la sala de profesores dedicamos ratos a preparar adornos navideños junto a las actividades del próximo viernes. Si alguien viera esta situación por medio de una cámara oculta, se le podría fácilmente ocurrir la  simpleza: "¡qué bien viven los maestros!"

viernes, 9 de marzo de 2012

Lunes 19 de diciembre

Cosillas buenas han acontecido.
Uso el diminutivo porque no sé cómo funcionarán las nuevas herramientas (me refiero al nuevo paquete de pizarras digitales instaladas) cuando tengamos un mayor número de alumnos en las aulas. De momento no es necesario acudir a por la llave de acceso a Secretaría. Ya veremos más adelante

Hoy han faltado muchos: unos que no vienen por la proximidad de las vacaciones navideñas y otro puñado de ellos expulsados hasta el año próximo, 2012.

El/La administrativ@ no se ha incorporado todavía.

Primeras sesiones de evaluación: ruidosas y vocingleras pero, más o menos, se ha cumplido con los tiempos

miércoles, 7 de marzo de 2012

12 de diciembre

¡Por fin se ha inaugurado el vuelo de silla libre! Más de un  alumno tenía ganas.

Parece ser que la "inauguración" se ha producido desde el aula de convivencia-expulsados: según me ha narrado un/a compañer@, al estar el aula en el que en ese momento impartía clase justo debajo, vio que algo pasó cerca de la ventana. Se armó el revuelo en clase y cuando se asomaron a ver qué había ocurrido, vieron caer la otra silla. En total dos, han protagonizado "el nacimiento" de esta nueva modalidad de conservación del material escolar. También, según me ha comentado el/la compañer@, l@s actores/as han sido expulsados otro período, previa guerra dialéctica en el hall  de entrada, entre las madres de l@s pupil@s y la Jefatura de estudios

lunes, 27 de febrero de 2012

2 de diciembre

Ayer prescindí de llevar adosado el lazo rojo en la solapa. Otros años, me preocupaba el día antes de acudir a una mercería que al final siempre me regalaban el trocito de cinta. Pero este año no he puesto mucho interés. Pese a que los chavales tuvieron una buena acogida al Día de la Violencia de Género, el tema del "macho alfa" está mucho más arraigado aquí de lo que he visto en otros centros, y me vería dando muchas explicaciones. De todas formas, algunos ya me han etiquetado (como a veces yo a ellos: donde las dan las toman). Me lo confirmó el pasado lunes una alumna, sin malos modales, pero directa: "maestro, ¿tu eres maricón, no?", por llevar de vez en cuando un pañuelo al cuello; ¡dónde se ha visto tal cosa en un tío!

Otr@ alumno del curso excelente ha sido expulsad@, ya hasta después de las Navidades. ¿El motivo?: tirarle piedras al autobús escolar; ¡a saber por qué!

viernes, 24 de febrero de 2012

Miércoles 30 de noviembre

¡Soy un "güevazos" y un flojo!


Estos son los versos que me ha dedicado la Jefatura de estudios. Y quizá tenga razón:soy demasiado flemático para este campo de batalla.

Día relativamente tranquilo, salvo los alumnos de 4º, que parece que no querían dejar a ningún profesor dar la clase. Uno de "esos" días. Por suerte, no los tengo. Pero he vuelto a caer en el mismo error que cometí el 29 de septiembre; ¡otra vez! ¿No habrá dos sin tres?:

A última hora tenía guardia y vi entrar a los padres de la/del alumn@ con el/la que tuve el incidente del cuchillo de madera. Después de verlos esperar un rato (venían a hablar con el/la Orientador/a y con la Dirección, pero no habían pedido cita) me acerqué a ellos -¡toooonto, qué soy tonto!- diciéndoles que fue conmigo con el profesor con el que tuvo el incidente su hij@. La madre parecía razonable (el padre habla poco) y me relató lo que había contado su hij@ en casa que, más o menos, era lo que había pasado en el aula. Nada me contó de lo que luego había montado "la criatura" en Jefatura
Se acaban las clases y cuando me dispongo a salir ya veo formado el círculo de la Dirección, la Jefatura, Orientación y los padres. Me llaman para que me acerque e informe. Poco puedo hacer, porque el cabo de unos segundos ya estaban echándose los trastos a la cabeza la Jefatura y la madre, respecto a lo acontecido en el despacho de la primera. Empezaron a soltarse "lindezas" de incompetencia en sus funciones y yo no podía hacer más que observar como en un partido de tenis.
Cuando la dirección invita a dejar la discusión para otro momento, la madre, ya caliente, empieza a exagerar mi reacción a la hora de quitar de la mano el cuchillo de madera que portaba su hij@. Yo me quedo a cuadros pero tampoco me atrevo a intervenir en la discusión a voces. Mientras, el/la orientador/a pedía también enfriar el tema y posponerlo para un momento en el que no estuviera la/el alumn@ delante.

Todo se acaba, merced a un "acto de dispersión" por parte de la Directiva y al salir del centro la Jefatura de estudios se dirige a mí y me reprocha que la/le he dejado sol@ y que soy un güevazos y un flojo. Yo seguía con cara de circunstancia aguantando el chaparrón de calificativos. Al final, le pedí disculpas (hasta tres veces) porque creo que sí tenía que haber dicho algo, pero para eso también tendría que haberme puesto a dar voces y es algo que no me sale; necesito entrenamiento.
Estoy seguro que mañana la Jefatura también me pedirá a mí disculpas por lo que me ha dicho. Escribo esto último con un sonrisa.

jueves, 23 de febrero de 2012

29 de noviembre

Día muy tranquilo por parte de los alumnos. El Equipo directivo tampoco ha sido pródigo en atenciones y ha contribuido.

La puerta del baño está contigua a la de la sala de profesores y esta mañana hemos sufrido una colisión, yo saliendo del servicio, y el/la compañer@ de E.F que salía corriendo (no andando deprisa) de la sala de profesores. Tal es el estado de preocupación por no dejar la clase "descubierta". No se cansan de recordarlo en los cambios de hora la Dirección y la Jefatura:
"¡Vamos señores, que os están esperando!"

El/La administrativ@ no se ha incorporado todavía.

miércoles, 22 de febrero de 2012

28 de noviembre

¡Todavía tengo la cara encendida, y eso que hace ya un rato que llegué a casa! Imagino que será algo normal, después de una charla acalorada... pero vamos por partes:

Esta mañana me incorporé tarde pero a lo largo de la mañana noté a los alumnos dispersos en clase y algo de tensión (más de lo habitual) en la Jefatura de estudios. Al terminar, me contaron que a la/al alumn@ del/de la que ya he hablado repetidas veces (que entra, sale, sube...) "se le había ido la pinza" y quería "matar" a alguien de 4º porque le había dicho no sé qué.... y en su intento de asesinato, antes de que vinieran a buscarlo para que se relajara en casa, puso el instituto patas arriba.

Esta tarde, parte de la exclusiva dedicada a los cursos TIC que vienen, como la Navidad. La otra parte ha sido dedicada al equipo educativo del curso excelente. Yo intervine a las primeras de cambio, antes de que el/la orientador/a empezara a narrar los enormes problemas que arrastran un buen número de alumnos de ese reducido grupo. Quise saber si había alguna posibilidad de que ese curso no siguiera siendo el gueto en el que (al menos en mi clase) se había convertido. Quizá tiré de la manta y empezamos otro tipo de charla a la que se incorporó ya al final el Equipo Directivo, el cual, de una forma directa y con el uso de varios ejemplos, nos tildó de incompetentes, justificando llanamente el uso de las voces para los casos que lo requieran. No pude callarme, entré al trapo y les puse de manifiesto el "mutuo sentimiento de incompetencia que yo también percibía con su gestión" .
Quizá lo único positivo en cosas tan desagradables, es que algún/a compañer@ más alzó también la voz. Como ya dije en algún momento, sólo nos tenemos a nosotros.

viernes, 17 de febrero de 2012

Viernes 25 de noviembre

Día Internacional Contra la Violencia de Género
Estoy leyendo La Fiesta del Chivo de Vargas Llosa e, ignorante de mi, no sabía que el crimen de las Mirabal que perpetró Trujillo y su séquito hace treinta años, fue el punto de partida de la celebración de este día

Ha estado bien; mucho mejor de lo que imaginaba. Se ha dedicado prácticamente toda la mañana a este evento y se ha desarrollado con bastante fluidez y colaboración de todos, incluidos los alumnos. Los organizadores han currado los suyo para desarrollar algo muy necesario y quizá más visible en el ámbito en el que nos movemos:
Ayer una alumna me dijo, con la mayor naturalidad, que su hermano pega a su cuñada y esta última (según sus palabras) lo ve normal.
No me llevo las manos a la cabeza, porque en otro niveles sociales lo "normal" quizá sea ocultar esa violencia

miércoles, 15 de febrero de 2012

24 de noviembre

Ayer fue un día normal: no hubo nada que mereciera la pena reseñar. Ni tan siquiera necesité la dosis del Concerto Grosso de Geminiani y que tengo metódicamente preparado una vez me subo al coche. Sólo diez minutos de gran ayuda camino de casa.
Fue la calma que precedía a la tempestad

El curso excelente se ha convertido en un curso del que depende en su totalidad el que tengas un día regular (quizá normal) o malo. Si a esa hora le sumas algún conflicto más en el devenir de la jornada, lo que era sólo malo, empeora considerablemente.
Cuatro horas a la semana.
Cuatro días de cinco laborables.

Podría dedicar muchas líneas a lo que fue aconteciendo desde el primer momento de esa quinta hora, cuando ya los alumnos ni tan siquiera querían entrar en la clase. Pero prefiero irme al final y describir un "cuadro realista": lo que vería cualquiera que hubiera entrado en el aula unos segundos antes de que tocara el timbre que marca el final de "esa" hora:

Vería agua en el suelo, nada más entrar, y una botella azul de plástico, también en el suelo, sin tapón y doblada por la mitad.
Vería una silla en el suelo, junto a la pared, a la derecha, y dos mesas con dos silla encima, puestas al revés, porque todavía no se habían bajado desde la tarde anterior, cuando la gente que hace la limpieza las colocó de esa manera.
Vería dos alumn@s asomados a una de las ventanas, viendo que ocurría fuera (del centro) y otr@s dos alumn@s en el lado opuesto, concentrad@s en sus teléfonos móviles y su música.
Vería un/a alumn@ dormitando en la segunda fila, junto a la ventana, otr@ más "practicando" lo mismo en una de las filas centrales y otr@s dos en la pizarra haciendo dibujos en el lado derecho de la pizarra. En el otro extremo habría algunas frases de la materia que imparto.
Vería dos alumn@s sentad@s en sus pupitres, cerca de la mesa del profesor, acabando sus fichas.
Faltaría un alumno que había salido al baño diez minutos antes y que prefirió "incorporarse" en la siguiente hora.
Vería al maestro (o que intenta ejercer como tal) en pie, detrás de su mesa, tratando de ayudar a los alumnos que intentan hacer las mencionadas fichas, y tratando de ignorar al/a la alumn@ que tiene, también de pie, pero SUBID@ a su mesa (la del maestro) amenazándole para que le devuelva el cuchillo de madera que le había quitado diez minutos antes de acabar la clase, porque no se lo había querido dar educadamente,  después de haber estado "jugando" con otro alumno a que " se lo iba a clavar"

Ración extra de música para llegar a casa.

viernes, 10 de febrero de 2012

21 de noviembre

 Esta mañana, a segunda hora, todavía no había visto al/a la adminsitrativ@. Suponiendo que seguiría de baja, le pregunto a la Secretaría que me lo confirma con un: " yo me basto y me sobro, ¿no me ves?"

El Equipo Directivo ha encontrado una salida para la/el alumn@ del/de la que hablé el pasado ocho de noviembre: un cambio de clase
A una de mis clases

Esta tarde hemos tenido charla sobre las actividades extra-escolares que cada año impulsa el Ayuntamiento. Al finalizar, se trataron algunos temas. Entre ellos, la incorporación de cuatro nuevas pizarras digitales. No pude evitar una sonrisa de sarcasmo al ver la utilidad que se está obteniendo de las ya instaladas.
El compañero que tenía a la derecha comenta:
"¿No sabes que la persona que lleva la instalación de todas estas tecnologías es un familiar directo del Cháves?
Pues no, no lo sabía

Al terminar la reunión hablo con el/la tutor/a del curso excelente, al darme cuenta que en el tablón de anuncios está anunciada la expulsión de un@ de sus pupil@s, para casi un mes:
- Sí, me ha costado un librazo y unos cuantos insultos para que nos deje en paz unas semanas...
- ¿¡Qué te ha pegado!?
- Sí, le señalé en el libro el ejercicio que tenían que hacer, me lo quitó y me dio con él en la espalda...
(Mis ojos como platos le invitaron a seguir la narración)
(...) y además me llamó de todo: Bob Esponja, gord@ asqueros@... ¡hoy me han dado un día... qué todavía tengo taquicardias! ¡Me voy ahora mismo a hacer mi sesión de spinning para quemarlo todo!

¡Qué bien (pienso yo) que nos vamos acostumbrando a estas "cosillas" que luego podemos quemar en el gimnasio! Quizá el Stockholm syndrome no es exclusivo de los secuestros 

jueves, 9 de febrero de 2012

Miércoles 9 de noviembre

No tengo la consulta con la médico hasta las 11:00 y como soy tooonto, acudo al instituto para que l@s alumnos que faltaban de hacer el examen, lo hagan.
Llego a las 9:30 y no he podido ser testigo de lo ocurrido a primera hora, así que sólo puedo relatar lo que me han contado:

Al parecer, la/el alumn@ del/de la que hablé el día previo, así como otr@ "hermanit@ de la caridad", llegaron a las 8:30 al centro con las pilas bien "cargadas". Fueron expulsad@s de sus respectivas aulas y, al parecer, tampoco se avenían a las indicaciones de los compañeros de guardia, que acordaron llamar a sus respectivas casas. Generalmente se le pide al/a la administrativ@ que llame y explique a sus familias lo que ocurre con sus "retoños". Parece ser que eso no les gustó a l@s dos sujet@s y se enfrentan a través de la ventanilla de la secretaría con el/la administrativ@, que decide salir de su despacho para indicarles que vuelvan a sus clases y esperen hasta que venga un familiar a recogerl@s. L@s alumn@s en estos momentos se "sienten amenazados" y así se lo comunican a una de las madres cuando llega, que pide explicaciones al/a la administrativ@ de "por qué ha querido pegar a su hij@"
Ante la "pinza" creada por la madre y su retoño, al/ a la administrativ@ le entra un ataque de ansiedad y se marcha del centro llorando.

¿Alguien quiere decir algo? (ironía)

miércoles, 8 de febrero de 2012

8 de noviembre

Tenemos un/a alumn@ diagnosticad@ con T..... que debería estar tomando la medicación apropiada y prescrita, pero él/ella dice que "no toma esas mierdas". Su familia tampoco es capaz de persuadirla/le y en el instituto se mueve buscando siempre que alguien "le encienda la mecha": busca, provoca, sale, entra, sube, baja...! Él/Ella no toma "esas mierdas", pero el resto nos comemos la suya.

Durante la guardia, me senté un poquito con ella/él en la escalera (de mármol, muy calentitas) ya que no hay bancos, para que hablando, se desahogue un poco y así dejar que el compañero de la clase en la que debería estar, pueda hacer algo. Me contaba que este año no es nada en comparación con el curso pasado, en el que, por estas fechas, ya habían volado sillas en clase y..."fissha! yo hice que una maehtra saliera llorando de clase!"
¡Todo un logro!

Los resultados de los últimos análisis han sido sólo regular. Mañana me darán unos días de baja, a ver si el especialista logra encontrar "la vía de agua".

Lunes 7 de noviembre

¡Recuerdo una época....!
No hace falta remontarse mucho; el curso pasado por ejemplo, que ahora veo como el nirvana: entraba en clase y los alumnos se sentaban y poco a poco se iban callando...

martes, 7 de febrero de 2012

4 de noviembre

Una tarde dedicada a la "papelería":

En centros como en el que me encuentro este curso hay un elevado número de alumnos que llevan una "D" incorporada (DIS: discapacidad leve - o grave- DES: desventaja socio-cultural, etc) lo que supone, sino un mayor control, sí un mayor número de papeles que rellenar, sobre todo si, como es mi caso, desarrollas funciones tutoriales.
No entro a analizar su utilidad, pero hay un "lado oscuro" que recae sobre los encargados de realizar esta labor burocrática: no nos la pagan. Da igual que seas interino, que tengas la plaza o estés cercano a la jubilación. El curso pasado, en un centro "normal", no me tocó ser tutor, pero l@s compañer@s que sí eran, se quejaban de la misma falta de retribución económica. Aunque se veían incapaces, porque somos maestros antes que funcionarios, de decirle a unos padres o a sus alumnos, "perdone, pero no le puedo atender porque este tiempo no me lo están pagando"

Este año tengo el añadido de una mayor presión por parte de alumnos, familias, equipo directivo, servicios sociales... pese a estar en igualdad de "malas nóminas" que el resto de los centros. A ésto, los políticos lo llaman "café para todos".
En este centro nos toca el café de "recuelo"

lunes, 6 de febrero de 2012

Jueves 3 de noviembre

Aunque suelo aprovechar la última hora del jueves para ordenar "la papelería", hoy he decidido irme a casa para no "emparanoiarme", como dicen nuestro pupilos.

Estaba el ambiente tan alterado que temí que me fuera a salpicar algo antes de irme, sobre todo desde la Jefatura de estudios, cuyas voces se mezclaban con otras y con el aporrear de puertas. Me pregunto, ¿cómo quiere que nos hagamos respetar por los alumnos si él/ella no distingue y se dirige a todos por igual?
Durante la hora de guardia, mi compañer@ y yo no dábamos crédito al jaleo que salía de muchas clases, tanto, que salían sin permiso alumnos, quejándose del ruido que había dentro. Otr@s, como el/la pre-delincuente que me empujó en clase (le pediré disculpas al/a la orientador/a por etiquelarl@) no necesitan permiso de nadie para salir de clase, y al volver de su "paseo" hasta el baño, pega tal portazo, que no puedo por más que entrar en la clase en la que se encontraba, interrumpir al compañero que estaba dentro, y decirle "la próxima vez tienes que cerrar más fuerte, para así  arrancar la puerta de un solo golpe!". Me mira con cara de circunstancia y el compañero que daba la clase me reconforta: "no te esfuerces; no entiende la ironía". 

Cuando vuelvo a mi puesto, la pareja de guardia me comenta que en ratos así, se siente como Clint Eastwood controlando una cárcel. Sólo me falta una porra, para ir golpeando los barrotes y llamar la atención de los reclusos para que entren en sus aulas, dice.

Miércoles 2 de noviembre

Día relativamente tranquilo.
Los griegos están poniendo a prueba los cimientos de la UE. Mientras, nosotros hablamos de la próximas opos y las muchas dudas que todavía están en el aire.

Se han incorporado dos nuev@s alumn@s. Un@ es novel, mientras que el/la otr@ es veteran@, tanto, que en su primer día ya se ha llevado dos partes

viernes, 3 de febrero de 2012

Jueves 27 de octubre

¡Día increíble; día normal!:

Considero "normal" el tener una clase con adolescentes que se aburren, que no quieren trabajar, que interrumpen, que prestan atención, que no la prestan... También la lluvia a contribuido a reducir el número de asistentes. ¡Me pregunto qué harán en invierno los alumnos de latitudes más al norte!
Por eso escribo este diario: para que días normales, como el de hoy, no me hagan olvidar otros menos gratos.

Pero hoy he sido yo el afortunado; a la hora del recreo, tomando café, hay otros compañeros que no han tenido tanta suerte.

Acabo a las 13h., me quedo haciendo unos papeles y salgo a las 13:30, al tiempo que entra la Dirección y la Jefatura de estudios. Cruzo los dedos. Nos despedimos cordialmente hasta el día siguiente. Subo al coche y pongo música.. "Heaven.... I'm heaven (...)!"

jueves, 2 de febrero de 2012

Miércoles 26 de octubre

Mi tutoría lleva toda la semana muy alterada, con varios parte diarios.
Hoy, a un/a alumn@ le ha dado por "probar" lo bien que cortaban sus tijeras y ha cortado (valga repetir) el tirador de una persiana en plena clase de LCL. "¿Alguien tendrá que pagarlo?", le digo yo. Y entonces viene al llanto y las lágrimas por "no saber lo que hacía".

En la sala de profesores la/el compañer@ de CC.NN ha comentado:
- ¿Sabéis que en los próximos presupuestos la Junta va a aumentar el dinero destinado a Educación?
-silencio- Como sé de su ironía, espero la continuación: (...) va a aumentar el dinero destinado a ordenadores, ultra-portátiles, pizarras digitales... 
El resto de los que estábamos allí sólo sonreímos (no comment!)

miércoles, 1 de febrero de 2012

Jornada de reflexión

He dormido muuuy mal. Imagino que ha sido fruto de volver a revivir lo del 25 de octubre, porque unas cuantas vueltas sí que he dado al asunto desde el día de ayer

Pienso si en verdad todo fue culpa mía por no saber, como decía la Jefatura, manejar a "cuatro monigotes", que en aquel momento eran once

Pienso si la Educación me esta mostrando una cara que no conocía hasta la fecha. Si de verdad no valgo para una profesión en la que me siento bien, muy bien y que me reconforta; con esos grupos difíciles que te retan a usar estrategias, a tener siempre un as en la manga, pero que cuando consigues despertar la curiosidad y el interés de algún alumno que sólo pensaba en abandonar... no se te olvida: Israel era "parte del mobiliario" cuando entraba en clase; incluso me pedía permiso para dormir, hasta que un día, entre sueños (supongo yo) corrigió en alto a un compañero; fue el comienzo, allá por el mes de enero. Tres meses más tarde ya había recuperado mi asignatura de 3º y en junio me ayudaba a corregir los ejercicios de los alumnos de refuerzo. Pero también está el ejemplo de Sandro y el de Noelia.... Sin embargo, en este instituto hay demasiados frentes abiertos

Quizá esto sea así y ya está: que hay que pasar por una experiencia que me va a enseñar a relativizar muchísimo ¿pero de verdad es necesario sufrirla?

Pienso, si no tengo derecho "al pataleo" ante lo que está cayendo; ante las dificultades económicas y la falta de trabajo

Por pensar tanto no he dormido. Ya no sé si este diario me hace bien o me hace mal

martes, 31 de enero de 2012

Martes 25 de octubre (continuación)

(....)
Tengo guardia a segunda hora y falta mi compañer@ de vigía. Pido a la Secretaría que me sustituya mientras hablo con la Directiva. Ésta tiene una llamada de teléfono y sólo me queda comentar el asunto a la Jefatura de estudios. "Cuanto más absurdo es un evento, con más precisión se te grava" (extracto de un comentario de Boadella sobre Un Perro Andaluz de Buñuel). La conversación se llevó de la siguiente forma:

Empiezo yo comentando los hechos:
- (...) A las ocho y media, cuando se estaban sentando los alumnos, bajando las sillas... el/la alumn@ X ha sacado el portátil de su mochila...
- ¿Y tú le has dejado?
- Bien: estaban sacando sus cosas de sus mochilas y ella/él sacó el portátil....
-¡Lo ves, ya empezamos mal! ¿Ha traído el portátil porque tu se lo habías pedido para hacer algún trabajo?, ¿no?, ¡pues ya empezamos mal!
- ¡ Me dejas que te cuente, o no me vas a dejar hablar??
- ¡Venga habla!
- Gracias
(Empiezo de nuevo y me vuelve a interrumpir)
- ¡Qué no hombre, qué no! ¡qué las has "cagao"! ¡qué con esta gente no se puede negociar, qué no vale! ¡qué no has impuesto tu autoridad desde el principio...!
(Ahora le corto yo)
- ¿¿Me vas a dejar de interrumpir??, ¡porque cooooño, qué difícil es hablar contigo! (ya me contagio de sus malas formas). Decidí tomar esa decisión porque creía que evitaba males mayores, pensando también en el resto de los alumnos que, a lo mejor, querían recibir un poquito de clase; algo a lo que tienen derecho, pienso yo...
(Por supuesto, me vuelve a interrumpir. De momento, la carga de la prueba ha caído sobre mí evidentemente)
- ¡Una clase, una clase..! ¡Te recuerdo que tienes cuatro monigotes en clase y parece que no eres capaz de llevarlo adelante!
(Me doy cuenta que el absurdo había comenzado. La "conversación" sigue, hasta que le cuento, a duras penas, todo lo acontecido. Él/Ella, lo zanja como casi siempre)
- ¡ Verás que pronto lo arreglo, largando a ese/a individu@! ¡Porque a tí te tengo que aguantar hasta el nueve de septiembre, pero  él/ella se va enseguida p´a su casita!

Entra en la clase donde aconteció todo y tras un par de minutos de voces, sale con el famoso portátil bajo el brazo, seguid@ del/de la alumn@ que me insultó y empujó. Decide llamar a la madre para que le/la venga a buscar.
Un cuarto de hora más tarde, con la madre ya delante, le comenta que la joya de su hij@ le llamó "hij@ de puta", cuando le ordenó que se sentara en el pupitre que tenía marcado la tutora. No sé si remarcó eso como el hecho principal.
Expulsad@ hasta después del puente de noviembre

Acababa de comenzar la jornada y han sucedido otro buen puñado de cosas que merecería la pena relatar. Pero ya he tenido bastante que recordar por hoy. 

lunes, 30 de enero de 2012

Martes 25 de octubre

Escribir lo que aconteció en el día de la fecha no fue una experiencia grata. Ahora de nuevo,cuando "me toca" subirlo al blog me siento incómodo; me están sudando las manos, literalmente, ¡pero vamos a ello!

¡Hay días queee.....! y hoy ha sido uno de esos:

Primera clase de la mañana (8:30)
Se han incorporado l@s dos alumn@s que, al día de la fecha, llevan más del triple de días expulsad@s que dentro del aula.
Pues bien: mientras estaban los alumnos tomando asiento para el comienzo de la clase, a un/a alumn@ diagnosticad@ con ....... no se le ocurre otra cosa que sacar su portátil de la mochila. Con falta de reflejos por mi parte, en seguida, l@s dos "joyas" que he mencionado antes, se lo piden y él/ella accede a regañadientes. Ya empieza el problema. En ese momento pienso: " a est@s individu@s sólo l@s he tenido tres días en clase. En el primero fue expulsado un/a de ell@s. En los otros dos días han estado tranquil@s, escuchando música en uno de sus múltiples móviles, y han dejado que los pocos alumnos que quieran recibir un poquito, puedan hacerlo. Deben haber pasado ya cinco o seis minutos desde que tocó el timbre, hay mucha clase por delante y opto por esta vía, pensado que "es demasiado pronto para armar jaleo". Hablo con el/la alumn@ propietario del portátil:

- ¿Qué te parece si se lo dejamos diez minutos, que escuchen un poco de música...?

Ella/Él accede y comienza la clase con la fecha, dudas, corrección de ejercicios... Cuando pasan esos diez minutos les pido el portátil y ell@s reclaman diez minutos más, a lo que el/la chaval/a, accede de mal grado; se empieza a poner nervios@. No se atreve a pedírselo por miedo, según me dice. Le comento que lo mejor es que el final de la clase me lleve el ordenador a la sala de profesores y esté allí toda lo que resta de jornada, para evitar más problemas en las siguientes horas. Ella/Él accede, pero empieza a llorar y a decir que el portátil es suyo. Se levanta y empieza a andar por la clase. Pido educadamente el ordenador a la pareja, para evitar males mayores y volver a calmar a la clase, "que es muy temprano", les observo yo. Cuando trato de coger el portátil uno de ell@s se levanta y lo protege con el cuerpo con el ya clásico "¡a mi no me toques!". Decido "no tocar nada" y me dirijo al propietario del "problema" para calmarlo. Lo consigo, pero ya hay varios alumnos que a estas alturas se han animado y se empiezan a levantar.
Queda un cuarto de hora y pienso que podré salvar la clase, cuando, de repente, empieza a sonar música a todo volumen procedente del portátil. Decido zanjar el asunto y recogerlo. El/La que antes me había impedido hacerlo forcejea, se queja de que le he hecho daño en un dedo, se levanta, me empuja y me llama ¡gilipollas!. Estamos muy cerca  y le reto (después, me dí cuenta de lo tonto que puedo llegar a ser) a que me vuelva a empujar, cosa que, sin dudarlo, hace. No sé qué pretendía, porque sólo me queda volver a mi mesa con el maldito portátil y tratar de escribir los hechos fundamentales de lo ocurrido para el pertinente parte grave, pero no puedo: me tiembla la mano y tengo la boca seca. Trato de bajar el ritmo respiratorio, abro las ventanas y la puerta de la clase para que corra el aire y de paso me cercioro de que hay algún compañero de guardia cerca, por si se complica el asunto.  No hizo falta. Suena el timbre y el/la dueñ@ del portátil se quiere quedar con él pese a todo. Accedo, a la espera de mi charla con la Directiva para comentarle lo ocurrido.

(Continúo en otro rato)

martes, 24 de enero de 2012

Lunes 24 de octubre

Mucha lluvia y mucho viento. Hacía falta
Quizá ha provocado la ausencia de un buen número de alumnos. El lado malo es, que los que se han quedado tienen nulas ganas de trabajar, por eso, "porque hace mal tiempo"

Hemos tenido claustro escolar por la tarde. Hemos dedicado una buena parte en relatar las distintas actividades extra escolares propuestas por los distintos departamentos. Demasiadas: mi compañer@ de departamento, sentad@ junto a mí, me confirma que debido a las circunstancias económicas de las familias, sólo se llevan a término una cuarta parte.
Un buen número de compañer@s (incluida la Jefatura de Estudios) hacen comentarios jocosos de algunas actividades, el ambiente está distendido, pero de repente, la Dirección, personaliza las risas en un/a compañer@:
- "A ver.... que te estás riendo, ¿imagino que querrás aportar algo nuevo a lo que se está diciendo?". Todos nos callamos al percibir la tensión
El/La compañer@ se queda "a cuadros" porque éramos la mayoría los que estábamos haciendo comentarios. Le contesta algo que no recuerdo bien y todo sigue su curso. Al finalizar el claustro me dirijo a él/ella y le muestro mi sorpresa por el comentario de la Dirección, y aunque le quita importancia le ha dolido: "Creo que a partir de ahora le pediré permiso para respirar", me contesta. He pensado que mañana invitaré a un café a esta/e compañer@ y le pediré disculpas por no solidarizarme en ser abroncado delante del resto.

Nos han anunciado que mañana viene la Inspección y que tendremos que hacer los cambios de clase "ligeros". Para que no escuchar el follón cotidiano que se monta, digo yo.

lunes, 23 de enero de 2012

Viernes 21 de octubre

Reunión con el Equipo de Orientación.
Llego tarde. No recordaba dónde había dejado ayer el coche; ¡de traca!

Cinco minutos después de mi llegada se incorpora la Jefatura de estudios y nos metemos directamente en el relato de "la casa de los horrores". Te das cuenta, una vez más, que nuestros alumnos son sólo la punta de una lanza que se ha ido fraguando en la familia, el ambiente.. y a nosotros no nos han instruido para ser Paulo Freire. Tampoco para ejercer de diana, pero ambas cosas van con el cargo que desempeñamos este curso.

Desconecto en el último cuarto de hora para no llegar con cara mustia a la primera de clase

sábado, 21 de enero de 2012

Jueves 20 de octubre

Como no llueva, los profesores saldremos despedidos por las ventanas; despedidos por la acumulación de tensión.
Quizá nos sigan los alumnos

Hoy parece que ha acontecido una buena decisión política, social y de vida a nivel nacional. Ya veremos si es la refinitiva

Miércoles 19 de octubre

Última hora de la mañana. Guardia

Ya muchos alumnos están que se suben por las paredes y se oye mucho ruido dentro de las aulas.
Hay una clase vacía porque se los han llevado al aula de plástica y mi compañer@ y yo decidimos coger una silla, ante la ausencia de los bancos, para sentarnos en el pasillo.
Sube la Dirección, el/la compañero se levanta a ver porqué un alumno ha salido de su clase. La Dirección me pone la mano en el hombro y me pregunta: "¿estás cansado?", le respondo que sí porque efectivamente lo estoy. "Pues hay que estar de pie -sigue- y cuando terminéis la guardia poner las sillas en su sitio". Sigue su camino a la segunda planta y yo creo que tardo algo más de un segundo en darme cuenta de que está hablando en serio. Mi compañer@, que por entonces ya se había acercado, arquea las cejas y se encoge de hombros.

Ya sé uno de los motivos por los que quitaron los bancos.